Innovación, colaboración y tecnología para transformar la sociedad

Por Cristina Pérez de Lema. Responsable del programa Talento Solidario de la Fundación Botín.

Los cambios vividos en los últimos años, especialmente tras la pandemia, sumados a la aceleración tecnológica, han puesto de manifiesto una nueva manera de entender los negocios y la forma de operar de las organizaciones. Las empresas, el sector público y el Sector Social, para afrontar los desafíos actuales, deben buscar nuevas fórmulas -cada vez más creativas y colaborativas- para ofrecer respuestas innovadoras, diferentes y más eficientes, pudiendo así lograr avances sociales sostenibles y a gran escala.

Muchas organizaciones llevan tiempo modificando su manera de operar. Han reconocido la necesidad de pasar de un modelo basado en el control exclusivo a otro basado en la colaboración abierta; es la nueva forma de crear valor y ganar cuota de mercado. Ahora trabajan con startups, con otras empresas, investigadores, instituciones académicas y filantrópicas, creando así a su alrededor ecosistemas de innovación que les permitan ser más ágiles y rápidas en el diseño de nuevos productos o servicios. Además, “lo social” en las empresas adquiere cada vez mayor relevancia, no solo en el fin (conseguir impactos positivos en la sociedad) sino también en el “cómo”, siendo aquí donde el Sector Social se convierte en su gran aliado.

También en el Sector Social están surgiendo nuevas formas de operar y de generar valor, diseñando iniciativas sociales económicamente viables desarrolladas desde la colaboración, muy diferentes a las tradicionales. En el caso de la Fundación Botín, llevamos más una década fomentando la innovación y la colaboración en el Tercer Sector. Para ello, lanzamos desafíos para los que las entidades sociales, ante un reto social determinado, trabajan en la búsqueda de soluciones innovadoras de manera conjunta.

Son muchos los proyectos que se están poniendo en marcha desde entidades sociales de diferentes puntos de España y que, tras un trabajo guiado, se han unido para diseñar soluciones tecnológicas que van a mejorar la vida de muchas personas. Me gustaría mencionar algunos de ellos a modo de ejemplo: “APP Enlaza2” para personas con discapacidad intelectual en proceso de envejecimiento. También el Proyecto “Incluarte”, dirigido a la inclusión de niños y jóvenes en situación de exclusión a través del Arte, surgido de la colaboración entre cinco entidades sociales de diferentes disciplinas artísticas de ámbitos geográficos muy distintos.  

Por su parte, el Tercer Sector de Castilla y León ha estado trabajando para superar la brecha digital. Proyectos como “Activamemoria”, que ofrece servicios de estimulación on line para personas con Alzheimer, creado por tres asociaciones de Alzheimer de dicho territorio, o una aplicación para dispositivos con sistema operativo Android, llamada “AppLoFácil”, que permite superar la brecha digital a personas con grandes dificultades cognitivas en el uso de aplicaciones de comunicación, entretenimiento y organización.

En la Fundación Botín llevamos más una década fomentando la innovación y la colaboración en el Tercer Sector. Para ello, lanzamos desafíos para los que las entidades sociales, ante un reto social determinado, trabajan en la búsqueda de soluciones innovadoras de manera conjunta.

También está siguiendo este camino el Tercer Sector de Extremadura, con desarrollos tecnológicos como “MiDía”, una app de secuenciación de tareas para personas con discapacidad intelectual que mejora su autonomía en la realización de las tareas diarias de estas personas, diseñada por cinco entidades sociales de Extremadura.

Pero la cooperación no solo es intersectorial… sino que también se está trabajando en magníficos proyectos resultado de la colaboración entre el sector social y las empresas. ¿Y el nuevo proyecto “Moda re-cuenta” de Zara-Caritas?  Un claro ejemplo de creación de empleo, ayuda social y colaboración entre Empresa- Ong, cada uno en su ámbito. Una cooperación que dará, seguro, muy buenos resultado y que es ya un ejemplo para otras organizaciones, siendo tan solo una pequeña muestra de lo que está consiguiendo el Tercer Sector en la resolución de los nuevos problemas sociales y en su manera de afrontarlos. Los nuevos desafíos son irresolubles desde la actuación individual y precisan de respuestas y soluciones colectivas. Por ello, la capacidad de compartir visiones e información buscando la complementariedad de lo que cada uno hace bien, se convierte en algo fundamental para lograr cambios a nivel sistema.

Desde el programa Talento Solidario de la Fundación Botín nuestro próximo paso es desplazarnos, primero a Galicia y después a Cantabria, para acompañar al Sector Social de dichos territorios en el trabajo que están llevando a cabo bajo esta nueva cultura de la colaboración, afrontando en su caso el reto de la revitalización en el medio rural.

Aunque todavía nos queda mucho camino por delante en este cambio de mentalidad a nivel sectorial, os animamos a dar pequeños pasos y a avanzar en el trabajo colaborativo. A “provocar” espacios en los que pensar juntos, desarrollando nuevas alianzas estratégicas con sectores diversos y potenciando nuevas formas de interlocución social. Solo así lograremos una mayor autonomía y fortaleza. Por nuestra parte, desde el programa Talento Solidario de la Fundación Botín, nuestro próximo paso es desplazarnos, primero a Galicia y después a Cantabria, para acompañar al Sector Social de dichos territorios en el trabajo que están llevando a cabo bajo esta nueva cultura de la colaboración, afrontando en su caso el reto de la revitalización en el medio rural. Nos encantará contaros próximamente las nuevas soluciones que se vayan poniendo en marcha. ¡Seguro que nos sorprenden¡



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