El Tercer Sector: un sector atractivo para el talento

Por Cristina Pérez de Lema. Responsable del programa Talento Solidario de la Fundación Botín.

En los últimos años, el sector social se ha convertido en foco de atracción de talento. Cada día son más los profesionales que se plantean trabajar en él, e incluso muchos que hasta ahora no lo contemplaban para un desarrollo profesional desean trabajar o colaborar en él…. Y es que, talento de las principales empresas españolas se decantan cada vez más por incorporar a sus vidas un proyecto social y encontrar así sentido a su trabajo.

Lo cierto es que, desde hace más de una década, el sector social viene contribuyendo de manera decisiva a la generación de empleo en España. Incluso en los momentos más complicados, en plenas crisis económicas y recesiones, ha sido capaz de hacerlo. Los datos lo demuestran: en plena crisis económica, entre 2008 y 2018, el empleo total del sector creció un 9.1% (de 529.029 a 577.230 empleados); de nuevo, con la irrupción de la pandemia, el sector social -a diferencia de la mayoría de sectores- creció en empleo un 1,57 % en un momento en el que sus ingresos descendieron (un 5% respecto a 2018) y aumentaron sus gastos (un 4,6 % más), mientras tuvo que hacer frente a una gran demanda social (46,21 M de atenciones directas).


Han sido muchos los factores que han contribuido a ello en esta última década:

  1. El sector está cada vez más profesionalizado, habiendo desarrollado un carácter innovador al tener que repensar constantemente soluciones para resolver los nuevos desafíos sociales a los que se enfrenta. Este afán de mejorar, de innovar y de ser cada día más eficientes ha logrado un cambio muy positivo de percepción en la sociedad, comenzando a resultar atractivo y retador para los nuevos profesionales.
  2. También influye algo que tiene que ver con sus propias señas de identidad, lo que le diferencia del resto de sectores: su misión o lo que llaman ahora “el famoso propósito”, que es algo valorado muy positivamente por muchos profesionales, ya que a diferencia de las empresas que ahora buscan su propósito, el sector social es “puro propósito”.
  3. Y, por último, existen otros factores que son extrínsecos al sector, que se deben a los cambios provocados por el momento actual de transformación que vivimos: los nuevos sectores de actividad emergentes, las nuevas formas de trabajo y una agenda de inversiones que llega de Europa para la creación de nuevos proyectos están dando forma al mercado de trabajo de los próximos años, presentándose como una fuente de oportunidades única que debe aprovecharse.

Desde hace más de una década, el sector social viene contribuyendo de manera decisiva a la generación de empleo en España.

En efecto, las nuevas economías están tomando fuerza en los últimos años. La economía verde, la economía social, la economía digital… están provocando la aparición de nuevos nichos de empleo de los que poder nutrirse. Además, la agenda de inversiones impulsada desde Europa brinda la ocasión perfecta para abrir nuevos cauces de colaboración con empresas y agentes sociales en el diseño de nuevos proyectos, lo que redundará en la creación de nuevos empleos. También, las nuevas formas de trabajo aceleradas por la pandemia se adecuan mucho a las formas de trabajo habituales: por proyectos. La deslocalización y globalización del talento, junto al teletrabajo, permiten acceder a nuevas fuentes de talento hasta ahora no disponibles. Esto está provocando una tendencia entre profesionales que trabajan bajo estas nuevas fórmulas, a poner su foco en lo social. Tal es el caso del talento Joven, que, trabajando de esta manera, también busca dar un sentido a lo que hace, haciendo de su proyecto profesional un proyecto vital. O el Talento Senior, hasta ahora inaccesible para nuestras organizaciones por sus elevados costes salariales, volviéndose hoy accesible bajo nuevas fórmulas de contratación, lo que permite incorporar profesionales con una dilatada experiencia y valía profesional en las organizaciones.

La deslocalización y globalización del talento, junto al teletrabajo, permiten acceder a nuevas fuentes de talento hasta ahora no disponibles.

La Fundación Botín lleva más de una década apoyando de manera decisiva la creación de empleo y profesionalización del Tercer Sector en España con el Programa “Talento Solidario”, identificando a los mejores profesionales que deseen trabajar o colaborar en él. Hasta la fecha ya se han generado más de 200 oportunidades profesionales. Y todo ello, nos ha permitido acompañar a casi 400 organizaciones en sus procesos de mejora interna, de innovación y de profesionalización, lo que nos ha convertido en testigos privilegiados de todos estos avances. Por todo ello, podemos afirmar que el sector social es cada día más atractivo para muchos profesionales y animamos a todas las entidades sociales a aprovechar este momento de oportunidad, para ser capaces de atraer el mejor talento a sus organizaciones.



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